Tras el viaje

Ha sido un viaje bastante completo, aunque con bastantes kilómetros también, la mayoría de lugares nos han gustado bastante y nos hubiera gustado poder dedicarle más tiempo, alguno nos ha sorprendido para bien, y alguno nos ha decepcionado.

Hay cascos históricos muy pequeños, que empiezan a estar saturados de turismo, deben empezar a intentar gestionar mejor las masas turísticas o su patrimonio histórico, que es mucho, acabará resentido.

Aunque Croacia todavía tiene su moneda (kuna), y las cosas resultan algo más baratas que en España, tampoco me parece que se note casi, creo que cuando entre en la zona Euro, el subidón de precios que puede pegar, será considerable.

Comenzamos por la capital ZAGREB, sólo le dedicamos un día, pero no nos hubiera importado quedarnos otro más; paseando por sus calles nos pareció que tiene mucho encanto, sobre todo la Ciudad Alta. Una ciudad con mucha vida y muchos lugares para visitar.

El castillo de PREDJAMA nos encantó, tanto el castillo que es una de las imágenes del viaje, como toda la visita con un audio guía excelente. Sin embargo las cuevas de POSTOJNA no nos gustaron tanto, se nos hizo la visita muy larga, porque al final es todo el rato lo mismo y te aburres.

La zona de ISTRIA, nos pareció espectacular, no te puedes perder ninguna de sus ciudades importantes, cada una tiene su encanto, POREČ y ROVINJ con la huella de los venecianos, y PULA con el Anfiteatro y otros restos del paso de los romanos; son todas impresionantes.

Que decir los maravillosos LAGOS PLITVICE, sólo por verlos ya vale la pena venir a Croacia, me encantó como tienen desarrolladas las rutas con pasarelas de madera, cada lago es diferente, con unos colores, una vegetación. Espectacular.

No tuvimos mucho tiempo para visitar ZADAR, pero esa mezcla de épocas con la puerta veneciana y el foro romano, la hacen muy atractiva. El famoso atardecer está bien, pero Croacia seguro que tiene otros mejores.

La ciudad SPLIT es difícil no visitarla, porque es punto de partida para ir a muchas islas, y aunque algunas cosas no nos acabaron de gustar, la grandiosidad del Palacio de Diocleciano, y que haya llegado hasta nuestros días, es una cosa increíble.

Visitar Croacia y no ir a ninguna isla es como que te falta algo del país, los ferrys forman parte del transporte normal para algunos de sus habitantes. La ISLA DE KORČULA es bastante visitada por los turistas y es por algo, el centro de Korčula es muy pequeño, pero de un gran atractivo, con sus estrechas calles.

Que decir de la famosa “perla del Adriático”, DUBROVNIK es una preciosidad y sus murallas son otra de las cosas por las que merece la pena venir a Croacia, nosotros sólo la pudimos disfrutar una tarde, pero nos encantó. Tienen que ponerse las pilas en cuanto al tema de la gente, en pleno verano debe ser un horror.

Una etapa del viaje que también nos gustó mucho, otro país y otra cultura, MOSTAR con ese maravilloso puente con toda su historia; y SARAJEVO otra ciudad con mucha historia reciente, con unas calles llenas de vida, fue otro de los lugares que no nos hubiera importado quedarnos más.

Y BELGRADO, para mí fue la gran decepción del viaje, entre que me esperaba algo más y que ya habíamos visto varias ciudades muy bonitas, nos pareció una ciudad bastante gris y con poco que ofrecer al turismo.

Este ha sido un destino del que he leído mucho, sobre todo de su historia reciente, comencé leyendo Croacia, pero claro, su historia va ligada a los Balcanes. No sé si todo lo que he leído será verdad, he intentado siempre leer varias fuentes; y bueno al final me he hecho una composición personal de su historia reciente, que desde luego no ha sido fácil.